Diferencia entre hábito y adicción

La ludopatía no es una problemática reciente, sino que durante toda la historia de la humanidad ha existido, y esto se debe a la importancia que se otorga al juego desde tiempos remotos. Sabemos que el juego es esencial en la vida de las personas. Éste tiene un papel crucial en el desarrollo de los niños ya que es una capacidad complementaria y necesaria para un desarrollo sano. Por ejemplo, gracias  a realizar actividades lúdicas los pequeños pueden asimilar distintos roles, reglas etc. de la cultura en la que están sumergidos; o poner en práctica sus destrezas y habilidades. Incluso las personas adultas que no padecen la problemática de ludopatía también realizan estas conductas. Es decir, el juego está presente en la vida de todas las personas, sea cual sea su edad y cultura, ya que es un comportamiento elemental durante el ciclo vital.

Entonces, ¿cuál es la diferencia entre el hábito del juego y la ludopatía? Hay que destacar que en un principio una conducta adictiva se efectúa porque es placentera en sí; pero una vez que surge el problema, este comportamiento se lleva a cabo por el alivio que siente la persona tras ejecutarla, ya que el hecho de no poder realizarla le produce mucha tensión.

El problema de la adicción surge cuando estas conductas interfieren en la vida cotidiana de la persona. De forma que la diferencia entre hábito o adicción radica en el fracaso de la persona al controlar sus impulsos; es decir, cuando la persona no puede dominar el impulso de jugar, y por tanto, posee gran dependencia a éste. Además se observa que estas personas tienen un deterioro de su vida personal: en el ámbito personal, físico, familiar, laboral, social etc.

Así mismo, habría que resaltar la importancia de la frecuencia y duración con la que el jugador lleva a lleva a cabo estas actividades. Este aspecto es más significativo que el dinero que pueden llegar a gastarse durante la acción de estas conductas. No obstante, como ya se ha mencionado anteriormente, lo relevante de la problemática es:

  • la pérdida de control al realizar la actividad,
  • la impotencia cuando no se lleva a cabo,
  • la dependencia psicológica y focalización atencional de la actividad,
  • la interferencia de estas conductas en la vida cotidiana con efectos perjudiciales en el ámbito personal y social.
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